Querida Madre Daría: Gracias por escribir nos… Tu carta nos une muy fuertemente a ti, a las hermanas de España, y a toda la humanidad sufriendo. Tu dolor, tu angustia es ahora nuestra. Tu fe y confianza en Dios nos fortalece y nos une a ti y a todas las hermanas de la Congregación en la oración…con la certeza que «la oración es nuestra arma vencedora.»
Un abrazo grande y mucho cariño,
Hema, Isable y Griselda.
Chaco, Argentina